(Para http://www.desacato.info)
Somos un glorioso ejército de hormigas dedicado a la noble tarea de sembrar, y unas siembran maíz, otras palabras y martillos, algunas más aldabas y alegrías, las hay que siembran abrazos y ladrillos… para entre todas sembrar los buenos días que, nadie lo dude, habrán de ser mañana.
Y poco importará cuando amanezca sí ese día faltamos a la cita, porque estaremos siempre, como estamos, en cada sueño, en cada aurora, en cada hermano.