Reeducar la justicia

 

Declara Vuelta-Simón, fiscal de Baiona, que el triple asesinato ocurrido días atrás en Anglet, Estado francés, de Christelle de 43 años; Carla de 12 y Enma de 16, a manos de quien fuera esposo de Christelle y padre de las dos niñas y que acabaría suicidándose, no tiene nada que ver con la violencia machista, que fueron “un drama sucedido en la esfera familiar”. Lo deduce de una carta dejada por el asesino que el fiscal define “confusa” y en la que durante 4 páginas el asesino habla de sus dificultades económicas y problemas familiares. Además de arrastrar una cuantiosa deuda, su esposa estaba en trámites de divorcio.

Pero ocurre que sí, que los tres asesinatos sí guardan relación con el machismo y la violencia que genera y bastaría para confirmarlo hasta la breve nota que apunta el propio fiscal negando tal responsabilidad. Que pudiera haber otras causas, siempre las hay, para nada excluye el machismo. Nada más característico en el pensamiento de un machista que considerar de su propiedad las vidas de las personas con las que comparte un proyecto de vida, su esposa y sus dos hijas en este caso. Una deuda económica, simplemente, hubiera podido explicar su suicidio. El triple asesinato de una esposa en trámites de divorcio y de dos hijas, solo se entiende desde la más perversa, por común y letal, de todas las ideologías: el machismo.

Urge reeducar a jueces, fiscales, a todas las personas involucradas en la administración de la justicia y que, constantemente, están poniendo en evidencia su incomprensión en relación a la violencia machista.

(Euskal presoak-Euskal herrira)