El Consejero de Salud del Gobierno Vasco ha desmentido los rumores que apuntan a la sopa de tapioca como responsable de la pérdida de libido y déficit de testosterona entre los ingresados en las residencias de ancianos del País Vasco. La sopa de tapioca es cena habitual en muchas de esas residencias y se ignora el origen de los citados rumores que, por cierto, también achacan a esa sopa el aumento de brotes psicóticos entre los ancianos residentes, aunque no haya, de momento, indicios que respalden semejantes creencias ni tampoco constancia de los citados brotes. Tampoco serían las únicas consecuencias que en la salud provoca la sopa de tapioca, según han difundido rumores sin fundamento que insisten en que su consumo está relacionado con la psoriasis y la rinitis. El consejero vasco también ha rechazado, mientras no se desarrollen las investigaciones pertinentes, posibles vínculos entre el consumo de la sopa de tapioca y el auge en las residencias de ancianos de la dispepsia, la osteoporosis, el botulismo, la bulimia, la amenorrea y la chikungunya, auge que, no obstante los rumores, sigue sin acabar de confirmarse, a la vez que el consejero de Salud desmentía la posible prohibición para consumo humano y animal de la sopa de tapioca y que, en ese sentido, esté actualmente Osakidetza elaborando un informe al respecto recomendando su erradicación.
(euskal presoak-euskal herrira)